(1607). Segunda y última parte de las admirables y regaladas revelaciones de la gloriosa S. Gertrudis, que contiene su feliz y dichosa muerte, no menos privilgiada ufelorecía de su querido esposo, que su santa visa: Declarase el tiempo y ocasion del transito de la serenisima Reyna de los angeles nuestra señora deste mundo al cielo, y misterior secretos cerca de la gloria del bautista, y evangelista,. y los santos mas señalados del cielo : donde (por las apariciones de animas el purgetorio, hechas a la gloriosa Gertrudis) se trata y pondera el rigor de las penas que en el passan, y se declara el modo más eficaz para aliviarlas. Valladolid: Por Juan de Bostillo: A costa de Antonio Cuello.
Citación estilo ChicagoSegunda Y última Parte De Las Admirables Y Regaladas Revelaciones De La Gloriosa S. Gertrudis, Que Contiene Su Feliz Y Dichosa Muerte, No Menos Privilgiada Ufelorecía De Su Querido Esposo, Que Su Santa Visa: Declarase El Tiempo Y Ocasion Del Transito De La Serenisima Reyna De Los Angeles Nuestra Señora Deste Mundo Al Cielo, Y Misterior Secretos Cerca De La Gloria Del Bautista, Y Evangelista,. Y Los Santos Mas Señalados Del Cielo : Donde (por Las Apariciones De Animas El Purgetorio, Hechas a La Gloriosa Gertrudis) Se Trata Y Pondera El Rigor De Las Penas Que En El Passan, Y Se Declara El Modo Más Eficaz Para Aliviarlas. Valladolid: Por Juan de Bostillo: A costa de Antonio Cuello, 1607.
Cita MLASegunda Y última Parte De Las Admirables Y Regaladas Revelaciones De La Gloriosa S. Gertrudis, Que Contiene Su Feliz Y Dichosa Muerte, No Menos Privilgiada Ufelorecía De Su Querido Esposo, Que Su Santa Visa: Declarase El Tiempo Y Ocasion Del Transito De La Serenisima Reyna De Los Angeles Nuestra Señora Deste Mundo Al Cielo, Y Misterior Secretos Cerca De La Gloria Del Bautista, Y Evangelista,. Y Los Santos Mas Señalados Del Cielo : Donde (por Las Apariciones De Animas El Purgetorio, Hechas a La Gloriosa Gertrudis) Se Trata Y Pondera El Rigor De Las Penas Que En El Passan, Y Se Declara El Modo Más Eficaz Para Aliviarlas. Valladolid: Por Juan de Bostillo: A costa de Antonio Cuello, 1607.